La Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) rechazó el acuerdo de cielos abiertos firmado por el gobierno nacional con Chile, y manifestó su “profunda preocupación por las políticas aerocomerciales” que lleva adelante la gestión Javier Milei, que anunció a través de redes sociales la desregulación en la provisión de servicios de vuelos comerciales. El sindicato que conduce Juan Pablo Brey criticó el acuerdo que entrega la totalidad de las libertades a líneas aéreas chilenas para operar en territorio nacional argentino, con aeronaves y personal extranjero.
“Este pacto intempestivo y de dudosa constitucionalidad implica la cesión de hecho de la soberanía sobre nuestro espacio aéreo, en perjuicio no sólo de nuestra línea de bandera, sino de todo un sector del trabajo nacional”, señaló el gremio en un comunicado.
La conducción de Aeronavegantes subrayó que “ningún país que defienda seriamente sus intereses nacionales entrega la explotación comercial de sus cielos con semejante servilismo y liviandad”. El gremio alertó sobre el riesgo de continuidad laboral de miles de argentinos y demandó medidas urgentes al gobierno para revertir lo actuado.
Acuerdo polémico
La entidad hizo referencia al memorándum celebrado horas atrás entre el secretario de Transporte, Franco Mogetta, la canciller Diana Mondino, el embajador argentino en Chile, Jorge Faurie, con el secretario de la Junta de Aeronáutica Civil (JAC) de Chile, Martín Mackenna, el embajador chileno en Argentina, José Antonio Viera Gallo, y el jefe del Departamento Legal de la JAC, David Dueñas.
Desde la Secretaría de Transporte señalaron que el acuerdo busca ampliar el panorama a toda la región y posicionar a Argentina como posible receptor de nuevas compañías aéreas. A su vez, se abre aún más el mercado para líneas aéreas argentinas en el país vecino.
Por su parte, el ex presidente del Banco Central y actual asesor del Gobierno, Federico Sturzenegger, expresó que “la agenda desreguladora de Javier Milei sigue avanzando”. “En 1924 Marcelo T. de Alvear autorizó a la francesa Compagnie Générale d’Entreprise Aéronautique para operar vuelos locales (en aquel momento más que nada para correo). Luego se impuso el pensamiento militar y el espacio aéreo se cerró para empresas extranjeras. Esto cambió recién esta semana cuando la canciller Diana Mondino firmó un tratado de cielos abiertos con Chile. Así, 100 años después de aquella primeriza autorización de Alvear compañías extranjeras podrán volver a proveer servicios aéreos en el país”, afirmó Sturzenegger.
Medidas gremiales
Para Sturzenegger, este acuerdo “no solo aumenta la competencia en nuestro mercado aerocomercial, sino que va a permitir mayor conectividad para ciudades y puntos turísticos claves de nuestro país”. “¿Se viene la conexión de Calafate o Ushuaia con Punta Arenas?”, se preguntó el asesor presidencial.
En este contexto, los aeronavegantes advirtieron con acciones gremiales y legales a los fines de “revertir esta salvaje medida”. “La obsesión del gobierno de atacar a los trabajadores y trabajadoras aeronáuticos argentinos, y en especial a la línea de bandera nacional, poniendo en riesgo concreto su continuidad, sólo tendrá como resultado una escalada de conflicto cuyos efectos son imprevisibles”, avisó el gremio.