Dictan la conciliación obligatoria en el conflicto de los controladores aéreos: garantizan vuelos en las vacaciones

La Secretaría de Trabajo nacional ordenó a la Asociación de Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA) que levante su plan de lucha, mientras se negocia la reincorporación del personal desafectado, entre otras cuestiones.

Jueves, 10 de julio de 2025 17:05

El Ministerio de Capital Humano, a través de la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, dictó la conciliación obligatoria en el conflicto laboral que involucra a la Asociación de Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA). La medida, que rige desde las 00 horas del 11 de julio y se encuadra en la Ley 14.786 y establece un período de conciliación de 15 días, motivo por el cual las partes deberán retrotraer la situación al estado anterior al inicio del conflicto, según se informó oficialmente.

En este contexto, la secretaría de Trabajo intimó a ATEPSA y, por su intermedio a los trabajadores por ella representados, a dejar sin efecto durante el período de conciliación, toda medida de acción directa y a prestar servicios de manera normal y habitual. Y de la misma manera, ordenó a la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA S.E.), a retrotraer los despidos producidos, por el plazo que dure el procedimiento conciliatorio.

La resolución se fundamenta en que “el Estado Nacional tiene el deber de garantizar la continuidad de los servicios esenciales para sus ciudadanos y resguardar el interés público, sin desatender los derechos laborales ni los mecanismos de negociación colectiva”. Las acciones gremiales afectaban principalmente a vuelos comerciales nacionales e internacionales programados entre el 11 y el 30 de julio de 2025.

Medida cautelar

Paralelamente a las negociaciones que se desarrollaban en la Secretaría de Trabajo, el gremio interpuso una medida cautelar de no innovar contra ANAC y EANA, la cual tramita ante el Juzgado Nacional del Trabajo N° 31.

Sin embargo, fuentes oficiales señalaron que “la decisión no es judiciable, porque fue tomada por la Autoridad Aeronáutica, con potestad sobre la Seguridad Operativa Aérea”.

Paro de pilotos

En tanto, la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) anunció un paro nacional para el próximo sábado 19 de julio, en una medida que promete tener un fuerte impacto sobre los vuelos comerciales en todo el país, justo cuando comienzan las vacaciones de invierno en la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires. Se prevé que la medida afecte tanto vuelos de cabotaje como internacionales, en uno de los fines de semana de mayor movimiento turístico del año, lo cual agudiza el conflicto en el sector aeronáutico en plena temporada alta. La razón del paro, es el rechazo de los pilotos a un decreto del Gobierno que, según denuncian, compromete la seguridad aérea.

Particularmente, el conflicto se centra en el Decreto 378/2025, recientemente firmado por el presidente Javier Milei, que introduce modificaciones en la normativa vigente sobre tiempos de actividad y descanso de las tripulaciones. Según APLA, la disposición "incrementa los tiempos de servicio de vuelo, disminuye los descansos y suprime artículos fundamentales para mitigar la fatiga", lo que a su entender pone en riesgo la seguridad operacional. En un comunicado, el gremio sostuvo: “Hemos decidido convocar a un paro nacional de pilotos de todos los sectores el día 19 de julio desde las 0 hasta las 23.59 horas. Instamos al gobierno nacional a dejar sin efecto el Decreto 378/2025, que presenta graves deficiencias técnicas”.

Además, APLA advirtió que no se trata de una disputa sectorial aislada, sino de una problemática que involucra cuestiones estructurales vinculadas a la seguridad aérea. “Advertimos que la implementación de dicho decreto representa un serio riesgo para la seguridad de los vuelos y hacemos responsables a las autoridades de las consecuencias de su aplicación”, indican en el comunicado. Desde el Gobierno, en tanto, han minimizado la protesta y atribuido motivaciones políticas a las acciones sindicales. En los últimos días, voceros del Gobierno señalaron que el gremio “responde a intereses corporativos que buscan resistirse a la modernización del sistema aéreo”. APLA calificó la postura gubernamental como un intento de “desviar la atención y deslindar responsabilidades frente a una medida claramente improvisada y peligrosa”.