Desde las 9 de la mañana, en el tradicional previo de Obras Sanitarias, los congresales de los más de 200 gremios que componen el entramado interna de la CGT comenzaron a llenar las instalaciones, de cara a un trascendental confederal, que elegirá las nuevas autoridades de la principal central obrera del país. En los días previos, las negociaciones se multiplicaron, para llegar a la cumbre con el mayor conceso posible. Por eso, antes de comenzar el debate las versiones eran claras: habrá un triunvirato, y dos de tres lugares están cerrados. Se trata de Cristian Jerónimo, del Sindicato del Vidrio, y Jorge Sola, del gremio del Seguro, que acumulan el respaldo de los principales gremios confederados. El tercer nombre divide a los sectores en las negociaciones de última hora, y corre con ventaja la continuidad de Octavio Arguello.
Jerónimo, secretario general del Sindicato de Empleados de la Industria del Vidrio y actual secretario de Salud Laboral de la CGT, logró sumar apoyos de sectores dialoguistas, independientes y también de gremios cercanos al kirchnerismo. El dirigente, que fue referente de la Juventud Sindical, acumuló el respaldo de alrededor de 40 organizaciones sindicales durante las últimas semanas. En la previa, tres “pesos pesados” se opinen a su llegada a la conducción. Se trata de Luis Barrionuevo (gastronómicos), Roberto Fernández (UTA) y Omar Maturano (La Fraternidad), que hasta último momento no lograron torcer la designación.
Por su parte, Jorge Sola, actual vocero de la CGT y titular del Sindicato del Seguro, completó el esquema de los dos nombres con mayor consenso. El dirigente ya viene moviéndose como virtual portavoz de la central en la pulseada con Javier Milei por la reforma laboral, con presencia frecuente en medios para defender la postura cegetista. Su capacidad para articular entre distintos sectores le valieron respaldos de las principales tribus cegetistas.
Tercero en discordia
En tanto, el triunvirato tiene entonces dos lugares prácticamente cerrados, pero el tercero en medio de una disputa de distintos sectores. Hugo Moyano, líder de Camioneros, empuja para que Argüello renueve su lugar en la conducción. El dirigente camionero maneja 69 congresales y busca posicionarse como factor de equilibrio para garantizar la unidad. La continuidad de Argüello enfrenta resistencias. Algunos sectores entienden que su permanencia atenta contra el mensaje de renovación que la CGT busca mostrar. Además, ese lugar es reclamado por Mujeres Sindicalistas, el espacio que promueve la igualdad de género en la central obrera.
En las primeras horas del miércoles, las versiones periodísticas daban cuenta que Arguello estaría logrando su continuidad. De confirmarse, Hugo Moyano se queda con su lugar en el triunvirato de la CGT luego de jornadas de intensas negociaciones, bajo el único pretexto de mantener la unidad y garantizar el equilibrio entre los espacios que componen la máxima central obrera del país. Desde hace un tiempo el camionero viene recuperando terreno en materia política y sindical, como quedó demostrado en las elecciones pasadas, cuando ubicó a su hijo Hugo Antonio como diputado nacional.
Pedido de las mujeres
Si se confirma esta estructura, quedará descartada la idea que una mujer sea por segunda vez integrante del triunvirato de la CGT, desde que a comienzo de los 200 Susana Rueda ocupara un lugar en la conducción. En los últimos meses circuló con intensidad el nombre de Maia Volcovinsky, secretaria adjunta de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación (UEJN). Pero hubo varios hechos que conspiraron contra ese ascenso. Por un lado, ningún sector la reconocía y defendía como integrante de sus filas. Por otro, causó malestar en la rama masculina un acto promovido por esta sindicalista en el que las mujeres reclamaban más lugares en la CGT.
Otros dirigentes que seguirán en sus cargos actuales en la CGT serían Andrés Rodríguez (Secretaría Adjunta), Gerardo Martínez (Relaciones Internacionales), José Luis Lingeri (Acción Social), Sergio Romero (Políticas Educativas) y Sergio Sasia (Vivienda), entre otros. Si Omar Maturano (La Fraternidad) decide sumarse al armado oficial, ya le habrían prometido que su hijo Sebastián continuará como secretario de Juventud.