La Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte ( CATT) remarcó la importancia de la “organización”, la “unidad” y la “disciplina” para enfrentar “los políticas libertarias que están resquebrajando la estructura social” en un escenario donde existen “trabajadores formales empobrecidos”, así como una aceleración de “la precarización laboral”. Además, consideró que “la movilización puede frenar las políticas destructoras del gobierno, y las elecciones deben sacarlo del poder”.
En un comunicado firmado por su Secretario general Juan Carlos Schmid y el secretario de Prensa, Juan Pablo Brey, la CATT realizó un análisis sobre la actualidad política y económica que atraviesa el país, con los desafíos por delante que enfrentamos desde las organizaciones sindicales junto a la clase trabajadora.
Para la Confederación, “una vez más ha quedado claro que la organización vence al tiempo y que la unidad es superior al conflicto, no es simplemente una especulación teórica, responde a las bases esenciales de la conducción táctica y estratégica”. También, recalcó que desde la organización sindical “no nos equivocamos cuando afirmamos que era necesario abordar esta etapa de resistencia con inteligencia y que esto demandaba preservar la unidad, la organización y la disciplina”.
Asimismo, destacó el valor de escuchar a las bases, ya que “desde la puesta en marcha del plan de acción se respondió a una necesidad interpretando algo más que el mero armado de la confluencia de estructuras para sostener la confrontación: de abajo hacia arriba se exigía contenido y sentido de la causa”. A modo de ejemplo, recordó “la masiva movilización al Ministerio de Sturzenegger tuvo un gran impacto como fue poner de relieve la trascendencia de la Soberanía Nacional, saliendo del esquema tradicional, dotándola de una carga humanista y subrayando el rol táctico en la discusión central”.
“En consecuencia el restablecimiento del estatuto del coloniaje, sobre una falsa representación de libertad, requería que el plan de acción no quede supeditado al consignismo ni a la fraseología apuntalada por escribas funcionales al régimen”, analizó.
Al respecto, destacó que “el éxito de la concentración del 25 de junio estuvo centrado en la carga política de los tres ejes que hacen a la constitución del Frente Soberanía, Trabajo Digno y Salarios Justos”. “Sobre ese piso se asientan los cimientos de la construcción colectiva, pero también el armado de un trazado programático que permita pensar la realidad nacional más allá de la coyuntura y del aparato electoral”, sumó.
“Históricamente, el Movimiento Obrero ha discutido el proyecto de país en relación a las actividades que desarrollan cada uno de los sectores involucrados en la consolidación de la resistencia que, valga decirlo, no puede gestarse en el repliegue, ni en el despliegue de aseveraciones teóricas o técnicas. En cada acción, las organizaciones ponen en juego el conocimiento de sus bases en función del valor estratégico que representan. Al mismo tiempo, existe un capital significativo que nutre cada plan de lucha y es el contacto con lo concreto: estar junto a las bases promueve un ensamble entre el pensamiento y la acción”, profundizó la entidad gremial.
“Ordenar la macroeconomía rompe vidas”
Luego, puso en relieve la imperiosa necesidad de advertir que “hacer Justicia Juntos no es ensamblar las partes sueltas de un todo difuso”, sino que “es establecer una unidad integral, representada, por ejemplo, en el Poliedro de Francisco; esta unidad, además de estar cohesionada por ejes transversales debe sostener un permanente contacto, una intensa comunicación, con la comunidad”.
En otro orden, la CATT ahondó sobre el negativo impacto de las medidas económicas del gobierno del presidente de la Nación, Javier Milei tras rememorar que “el 9 de Julio, con las ollas populares, pudimos comprobar que la política de destrucción con la que se pretende, falazmente, ordenar la macroeconomía rompe vidas”.
“El abandono de la política social del Estado tiene un impacto arrollador en la existencia de cada una de las personas que hace a la comunidad. La desintegración del Estado como medio de canalización de medidas que protejan a los más humildes comparece ante la realidad con la devastación de familias enteras”, pormenorizó y alertó que “el dato de aquel Día de la Independencia es que una gran parte de aquellos compatriotas que se acercaban a buscar una vianda de comida pertenecían a una franja etaria que oscilaba entre los 25 y 35 años. Es decir, las políticas libertarias están resquebrajando la estructura social”.
Sobre las herramientas para terminar con esas problemáticas, describió: “El desafío que tenemos por delante es profundo. La matriz reaccionaria impone el mandato de la disolución nacional y abarca también la desintegración cultural. Sabemos que ninguna de las políticas del gobierno tuvo impacto positivo sobre la calidad de vida de la clase trabajadora. Por el contrario, tenemos trabajadores formales empobrecidos y asistimos a una acelerada precarización laboral. Por lo tanto, nuestra tarea incluye un enorme trabajo de persuasión, incluso para con nuestros propios compañeros, pero no desde posiciones esclarecidas, sino desde la convicción de que no podemos entregarnos a la ignominia que promueve la “clase de los explotadores””.
“Enfrentar la anti-humanización”
Más adelante, en el comunicado, entendió que “luchar por la Soberanía, por el Trabajo Digno y el Salario Justo es hacerlo por la vida. Es decir: si para Milei la Justicia Social es una aberración, es porque su arraigo al materialismo es anti-humanista”. Por eso, ejemplificó con lo que sus integrantes observaron “en el barrio de Constitución, una zona arrasada por el abandono de las funciones del Estado”.
“Recuperar el sentido del contenido que nos une no solo nos ubica en la realidad concreta, sino que, además, nos obliga a transitar el camino de la humanización de la vida y de nuestra propia existencia”, exhortó.
En la misma línea, explicó: “Soberanía también es solidaridad e Independencia no es solo realización material, es realización humana. Por eso, el pasado 9 de Julio levantamos la idea de Amor e Igualdad, no como expresión sentimental, sino como factores esenciales que hacen a nuestra realización en la vida comunitaria”.
Ante la actualidad, planteó que “el desafío pasa por tomar la realidad como es, y eso se logra negándose a asumir falsas representaciones de unanimidades que no existen”. “Distribuyamos con equidad las culpas y responsabilidades, sin temor a que mencionar esto le haga un favor a la derecha”, afirmó.
La CATT puntualizó que “hoy las condiciones del poder se discuten desde tres valoraciones, la opinión pública, la movilización y lo electoral”. “La opinión pública merece mejor comunicación. La movilización, en la medida de su importancia y masividad, puede frenar las políticas destructoras del gobierno, y las elecciones deben sacarlo del poder”, repasó.
A modo de cierre, señaló que “los Cavallo, los Milei, los K Vasena, los Caputo, los economistas de todo signo podrán seguir haciendo experimentos… pero nosotros siempre volvemos”.