La crisis industrial que atraviesa el país volvió a golpear con fuerza a la ciudad de Venado Tuerto, donde la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) denunció 150 despidos en la empresa Corven, consecuencia de la apertura de importaciones impulsada por el Gobierno nacional.
De acuerdo con la organización sindical, 30 desvinculaciones se produjeron en la línea de Corven Amortiguadores, mientras que 120 trabajadores fueron cesanteados en Corven Motos, una de las plantas más importantes de la región.
El secretario general de la UOM local, Diego Olave, detalló que la situación se viene agravando desde fines de 2023 y que la pérdida de empleo responde directamente a la sustitución de producción nacional por componentes importados.
“Las fábricas dejan de producir para dedicarse a ensamblar”
En declaraciones a Splendid AM 990, Olave explicó que los propios empresarios admiten que la apertura comercial está modificando de manera drástica el proceso productivo:
“En vez de fabricar en muchas fábricas, se dedican a ensamblar piezas importadas. Esto va a generar muchísimo desempleo, y ya lo estamos viendo”.
El dirigente señaló que el impacto no es aislado. En los últimos seis meses, Venado Tuerto registró 34 despidos en Essen, a los que se suman ahora las bajas de Corven. La firma de artículos de cocina había anunciado la semana pasada que reemplazaría cerca del 45% de su producción local por partes importadas desde China.
Para Olave, el fenómeno es parte de un patrón claro: “Esto es consecuencia de una gestión de desindustrialización del Gobierno. El sector metalúrgico es el segundo más golpeado después de la construcción”.
Una ciudad industrial en retroceso
Venado Tuerto, con más de 100.000 habitantes y un parque industrial de peso en la región, viene experimentando un deterioro acelerado del empleo formal. La UOM advierte que los despidos en grandes fábricas tienen un efecto inmediato en toda la economía local.
“Todos los rubros están en la misma situación. Y cuando un trabajador se queda sin empleo, después le cuesta muchísimo encontrar una salida laboral”, señaló el dirigente metalúrgico.
Comparación histórica y nuevas dificultades
Olave puso en perspectiva el impacto sobre el empleo industrial en los últimos años:
- –70.000 puestos durante el gobierno de Mauricio Macri
- +22.000 recuperados durante la gestión de Alberto Fernández
- –30.000 puestos ya perdidos desde la llegada de Javier Milei
Según el gremio, el principal problema reside en que la importación reemplaza procesos productivos completos, reduciendo drásticamente la cantidad de trabajadores necesarios. El dirigente lo ejemplificó así: “Si una pieza se fabrica acá, trabajan 30 personas. Si la traen del exterior y solo se ensamblan algunos detalles, con ocho personas ese sector se vuelve productivo”.
Además, la UOM advirtió que el Gobierno demora la homologación de las paritarias, lo cual agrava la situación salarial en un contexto de inflación sostenida y fuerte recesión industrial.
Alerta sindical y reclamo de políticas productivas
Con los despidos en Corven como nuevo punto crítico, el sindicato volvió a reclamar que el Gobierno revise su política de apertura de importaciones y adopte medidas para sostener la producción local.
“Sin industria no hay trabajo, y sin trabajo no hay país”, concluyó Olave, en un llamado a frenar el proceso de desindustrialización que vive la región y el país.