Tras el cierre macrista, Fanazul se reactivó y volvió a producir

La Fábrica de Explosivos estatal ubicada en Azul inició la elaboración de Master Mix para vender a Perú, por lo menos durante tres años. En septiembre de 2022 comenzó a andar un pequeño sector, hasta que llegó a su punto de pleno funcionamiento con 120 trabajadores.

Por Redacción

29 de mayo de 2023

Luego de cinco años y cinco meses de cierre definitivo y desarme por decisión del gobierno de Mauricio Macri, la Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos “Azul” volvió a producir en el predio de 4000 hectáreas, ubicada a unos 35 kilómetros de la localidad bonaerense de Azul y comenzará a exportar a Perú.  

En diciembre de 2017 por decisión política 250 trabajadores y trabajadoras perdieron su fuente laboral, sin ninguna justificación ni percibir ningún tipo de indemnización. Eso provocó grandes movilizaciones en la ciudad, ollas populares hasta que lograron la reapertura. Actualmente son 120 obreros, de los cuales sólo un 5% no viene del proceso anterior mientras que los restantes consiguieron otros trabajos o bien se jubilaron.

En diálogo con Tiempo Argentino, el supervisor de Mantenimiento, Sebastián Madío, contó: “Arrancamos el 16 de mayo con pruebas de ajuste después de más de cinco años parados. Dijimos: ‘comencemos y vamos corrigiendo’. Y nos sorprendimos porque todo salió óptimo de una. Poder reincorporar compañeros que ya trabajaban acá, con experiencia, dio estos resultados”.

“La gente arrancó como si hubiera parado ayer, con la misma seguridad y responsabilidad, fue increíble. No pensamos que íbamos a arrancar tan fácil. Y lo bueno es que lo que vamos haciendo bien en la etapa de prueba ya es parte de la producción a vender”, agregó.

Resurgimiento y reactivación

Cabe recordar que, en plena pandemia y aislamiento, específicamente en mayo del 2020, empezó el resurgimiento de Fanazul. A través de Zoom, designaron como nuevo director al ingeniero y veterano de Malvinas, Oscar Espinosa, una persona que tenía años de experiencia dentro de la fábrica.

Al inicio, contrataron a 30 trabajadores que se comprometieron a realizar diversas tareas, desde mantenimiento del parque hasta la reconstrucción de la fábrica. En septiembre de 2022 vio la luz el servicio de Destrucción de Explosivos para fuerzas armadas, productores de explosivos y juzgados. Ese sector se encarga de destruir explosivos vencidos o en desuso de diferentes empresas que a través de la ANMaC (Agencia Nacional de Material Controlado) determinan su disposición final. También juzgados, como los de Comodoro Py, que hacen el oficio judicial y luego la fábrica le eleva las filmaciones de la destrucción al juez que la pidió.  

Luego fueron avanzando con la recuperación de las diferentes áreas. Iniciaron el proyecto de destrucción de chalecos y explosivos, que puede alcanzar los 5700 chalecos por mes: cada chaleco tiene su número y fecha de vencimiento. La tarea de los operarios es separar de la tela el kevlar que compone la parte “dura” del chaleco, triturarlo y reciclarlo.

Además, pusieron en marcha la nueva torre de Denitración de Ácidos Residuales, un edificio vidriado de cinco pisos, importado de Alemania. “Se iba a inaugurar en 2017, habían invertido millones, estaba listo y cerraron la fábrica. Ahora se la va a volver a poner en marcha, para recuperar el ácido residual que se use”, aseguró el supervisor.

Este mes pusieron en marcha el proceso de Nitroglicerina y Master Mix, con el ácido que proviene de Río Tercero, el cual será exportado a la firma peruana minera EXSA, del grupo Órica, con un contrato por al menos tres años. El objetivo es concretar 350 kilos de Master Mix por hora. Esta semana alcanzaron las 280. La empresa de Perú también está interesada en que le fabriquen dinamita.

Fanazul se inauguró el 3 de octubre de 1946 con la misión de producir bienes y servicios para la Defensa, la Minería y actividades afines. La fabrica pertenece a la Sociedad del Estado Fabricaciones Militares, y llegó a ser la única productora de TNT en Sudamérica.

Por último, Madío se refirió a la decisión del gobierno de Mauricio Macri: “Fue irresponsable porque no era una fábrica de galletitas, era de explosivos. Nunca pudieron sacársela de encima. Fue un desguace premeditado con maldad, la saña con la que cerraron”.

“Deberíamos estar festejando, pero está el fantasma de qué pasa si vuelve otro gobierno de derecha y por saña quiere cerrarla. Ese fantasma no te lo vas a sacar más”, concluyó.