La CGT enmascaró sus propias internas y le prodigó a Massa un respaldo "en unidad"

En los próximos comicios nacionales, más allá del resultado final se jugará quien conducirá el justicialismo a partir de 2024.

Pese al compleja situación socioeconómica que atraviesa el país, la CGT brindó "en unidad" un fuerte respaldo a Sergio Massa y a la espera de próximos anuncios en lo que será la segunda etapa de la campaña rumbo a las elecciones generales del 22 de octubre, esto es, el probable pago de suma fija para algunos sectores y un incremento en las asignaciones familiares.

“Nos reprochamos que no hayamos recuperado el ingreso. Nos pueden plantear enojo, bronca y hasta ganas de no ir a votar”, sostuvo el precandidato presidencial de Unión por la Patria en el acto del estadio de Malvinas Argentinas del pasado martes reconociendo elípticamente que el oficialismo llega a los comicios con la pesada sombra de una posible migración de los votantes que en 2019 devolvieron al kirchnerismo al poder, pero también de un probable aumento del ausentismo.

Por eso el líder del Frente Renovador volvió a pedirle a los militantes que salgan a convencer a los desilusionados con el Gobierno. Pareció una primera estrategia rumbo a las primarias. A partir de la semana próxima el escenario será distinto de acuerdo a algunas consideraciones que dejó ver en su discurso; vendrían los anuncios de bonos no remunerativos y de aumento en los montos de las asignaciones familiares.

Los mensajes del encuentro

Pero para no contravenir a los jefes sindicales también defendió las “paritarias libres” y dio a entender que las sumas fijas serán para los rubros de menores ingresos, como forma de mitigar los efectos de la alta inflación.

El otro mensaje que trasuntó el encuentro proselitista fue la defensa de la “unidad” como base para la construcción de la propuesta electoral de un oficialismo que este año se juega su permanencia en el poder.

Es por ello que se vio en el escenario al ministro Wado de Pedro (Interior), que a lo largo de la actual administración no ha tenido el mejor vínculo con la conducción cegetista y hasta la semana pasada algunos jefes gremiales lo acusaban de no haber podido “ordenar” la campaña del ministro-candidato.

También hubo presencia de gremialistas que orbitan alrededor de Cristina Kirchner, como Abel Furlán (UOM) o “Paco” Manrique (Smata). Este último, que va 3° en la lista a candidato a diputado por Provincia pero por su cercanÍa al kirchnerismo y no como representante de la “cuota sindical”, según admiten en la central obrera, se sentó al lado de Andrés Rodríguez (UPCN), al que en mayo pasado había acusado de intentar vender la histórica sede de calle Azopardo en supuesta connivencia con el larretismo.

Más allá de la elección

En medio de esta particular situación y de quejas por la organización del evento –“no dejaron a los compañeros meterse en los pasillos”, indicó una fuente gremial consultada-, se priorizó exponer mensajes de unidad y de apoyo sin límites a la fórmula que conforman Sergio Massa y Agustín Rossi.

El triunviro Héctor Daer no sólo presentó al ministro de Economía como el “futuro presidente” sino como el próximo “presidente del peronismo”. Está claro que, en los próximos comicios nacionales, más allá del resultado final se jugará quien conducirá el justicialismo a partir de 2024.