El Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) confirmó su participación en la movilización convocada por la CGT para el próximo 18 de diciembre. La Juventud Sindical será la encargada de organizar la columna que viajará a Plaza de Mayo para rechazar la reforma laboral impulsada por el Gobierno nacional, a la que consideran un ataque directo a los derechos de los trabajadores.
Los aceiteros del departamento San Lorenzo volverán a ganar la calle frente a lo que definen como una nueva embestida contra el movimiento obrero. La movilización busca frenar el proyecto que impulsa el presidente Javier Milei, junto al ministro Federico Sturzenegger, y que plantea cambios estructurales en el régimen laboral argentino.
La organización logística quedó en manos de la Juventud Sindical del SOEA, que busca replicar el nivel de participación logrado durante las protestas contra el DNU 70/23 y la Ley Bases. El mensaje es claro: defender en la calle las conquistas históricas que hoy están en riesgo.
Derechos en peligro, salario en discusión
Mario Chara, secretario de Organización del SOEA, explicó los motivos de la convocatoria y advirtió que la reforma no debe leerse como un cambio aislado, sino como un paquete integral que impacta de lleno en la vida de los trabajadores.
“Si no defendemos lo que supimos conquistar entre todos los trabajadores aceiteros y su familia es la destrucción de la clase trabajadora, sin distinción de categorías”, aseguró el dirigente.
“Tenemos los mejores salarios de la región porque hay convenios fuertes, organización sindical y derechos claros. Esta reforma viene a romper ese equilibrio. Si avanza, el trabajador va a perder poder adquisitivo y condiciones laborales”, afirmó.
En ese marco, Chara señaló que el debate sobre las horas extras es solo una parte del problema, ya que el sistema de “banco de horas” propuesto por el oficialismo flexibiliza la jornada laboral, permite mayor discrecionalidad patronal y afecta directamente el ingreso mensual.
Pero la alarma principal está puesta en el intento de debilitar los convenios colectivos de trabajo. El dirigente advirtió sobre el riesgo de modificar la ultraactividad que hoy garantiza la ley, es decir, la continuidad de los convenios aun cuando vencen, hasta que se negocie uno nuevo.
“Hoy nuestros derechos están protegidos por el convenio colectivo. Si esa protección se elimina, al vencimiento del convenio se abre una disputa desde cero. Eso significa poner en discusión cada derecho conquistado. El convenio es la columna vertebral de nuestro salario y nuestra dignidad laboral”, remarcó.
Una reforma que cambia las reglas de juego
Desde la conducción gremial sostienen que la reforma laboral propuesta por el Gobierno no busca generar empleo genuino, sino abaratar costos a costa de los trabajadores, debilitando la negociación colectiva y reduciendo el rol de los sindicatos.
“Cada paso que gana este gobierno con esta reforma es un paso atrás para los trabajadores. No hay neutralidad posible: o se defienden los derechos o se los pierde”, señalaron desde el sindicato.
Un historial de resistencia
La convocatoria actual no es un hecho aislado, sino la continuidad de un plan de lucha que el SOEA mantiene activo desde el inicio de la gestión libertaria. El gremio de San Lorenzo se consolidó como una de las organizaciones más combativas del Cordón Industrial.
El historial reciente marca una línea de conducta clara. Ya en diciembre de 2023, apenas asumido el nuevo gobierno, el Sindicato Aceitero marchó al Palacio de Justicia de la Nación junto a la CGT. En aquella oportunidad, el rechazo al DNU 70/23 fue contundente, llamando a la unidad de los trabajadores para defender el salario ante la amenaza de desregulación.
La tensión escaló en el verano de 2024. En enero, el SOEA paralizó la actividad exportadora por 24 horas en protesta contra la “Ley Bases”, una medida de fuerza que se replicó en abril con otro paro que el gremio calificó de "ejemplar", rechazando la mayor derogación de leyes en la historia de la república.
Pioneros contra el Impuesto al Salario
Mención aparte merece la batalla histórica del gremio contra el Impuesto a las Ganancias. El SOEA fue uno de los primeros sindicatos en lograr exenciones y la eliminación de la cuarta categoría para sus afiliados. Sin embargo, con la llegada de Javier Milei y la restitución del tributo, el sindicato volvió a ponerse en guardia, reafirmando que "el salario no es ganancia" y liderando los reclamos en cada puerto de la región.
Finalmente, Chara convocó a todos los afiliados a sumarse a la movilización del 18 de diciembre, apelando a la historia del gremio y a la memoria colectiva del movimiento obrero. “Como lo hicieron los viejos en los 90, hoy nos toca a nosotros levantar las banderas. Defender lo que conseguimos no es nostalgia: es responsabilidad con los que vienen”.