La Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) declaró el “estado de alerta” tras conocerse la decisión de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) de dar por finalizada la suspensión de los artículos del decreto 378/2025, una medida adoptada “de manera unilateral y sin el debido proceso de consulta técnica con los especialistas y trabajadores del sector”. La entidad estatal puso en vigencia el polémico DNU, mediante la resolución 812/2025, que introduce cambios en los tiempos de descanso, vacaciones y horas de trabajo del personal aeronáutico.
En un comunicado oficial, el gremio manifestó su profunda preocupación por las implicancias que esta decisión podría tener sobre la seguridad aerocomercial, uno de los pilares del sistema aeronáutico nacional. “Como organización sindical que representa a los tripulantes de cabina de todo el país, advertimos que decisiones de esta naturaleza, adoptadas sin el debido análisis técnico ni consulta con los especialistas y trabajadores del sector, pueden tener consecuencias directas sobre la seguridad operacional”, expresó el sindicato conducido por Juan Pablo Brey.
Falta de diálogo
Desde aeronavegantes remarcaron que la falta de diálogo institucional y el carácter intempestivo de la medida generan un escenario de incertidumbre en una actividad donde la seguridad y la previsibilidad son esenciales. En ese sentido, subrayaron que la resolución “rompe un equilibrio alcanzado a lo largo de años de trabajo conjunto entre las autoridades aeronáuticas, las compañías y los gremios, en pos de un sistema seguro y profesionalizado”.
Frente a este panorama, la entidad sindical anunció que se mantiene “en estado de alerta” y “evaluando los pasos a seguir, incluyendo las vías administrativas y judiciales correspondientes”, en caso de que las modificaciones introducidas afecten directamente las condiciones laborales de sus representados. Aun así, aeronavegantes aclaró que el Convenio Colectivo de Trabajo que mantienen con Aerolíneas Argentinas contempla disposiciones que mitigan parcialmente los efectos del decreto, aunque advirtieron que su preocupación se extiende a “otros colectivos laborales del sector que sí resultan directamente impactados por estas medidas”.
Otras quejas
De la misma manera, la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) se quejó de la medida, tomada de manera "unilateral" y representa un "claro desprecio al proceso de negociación" que ambas partes venían adelantando. El sindicato recordó que esta controversia motivó previamente dos medidas de fuerza, las cuales derivaron en una instancia de conciliación obligatoria. APLA acusa a la ANAC de romper "de manera intempestiva" dicha negociación, "quebrando los compromisos asumidos y agravando el nivel de conflictividad existente".
“Expresamos nuestra solidaridad con los trabajadores afectados y nuestro firme rechazo a cualquier intento de desregulación que ponga en riesgo la seguridad, la previsibilidad y las condiciones dignas de trabajo en la aviación nacional”, subrayaron los aeronavegantes, ampliando esta idea.