La Universidad Nacional de Lanús (UNLa) fue escenario de un encuentro que reunió a docentes y estudiantes para discutir el rol del Estado y el futuro del mundo del trabajo. El exministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, fue la figura central del panel, acompañado por el jurista Alfredo Ossorio y el politólogo Carlos Vilas.
Con un discurso cargado de definiciones, Tomada reafirmó la necesidad de defender el trabajo y la producción nacional como pilares inseparables de la soberanía argentina.
Tomada: “Sin política no hay transformación”
El exministro abrió su intervención subrayando la vigencia de la política como instrumento insustituible de cambio. “No hay posibilidad de transformación sin política”, afirmó, y advirtió sobre los intentos de deslegitimarla para debilitar la acción colectiva.
En su repaso por los principales desafíos que enfrenta la Argentina, Tomada planteó cinco ejes centrales:
- La política como herramienta de transformación, frente a las visiones que buscan reducirla a mera administración.
- La mejora de los ingresos, como condición indispensable para la cohesión social y el desarrollo económico.
- La centralidad del trabajo, en un contexto de avance de la precarización y propuestas de flexibilización laboral.
- La protección social como derecho, y no como gasto, en defensa del entramado solidario de la sociedad.
- La necesidad de un Estado fuerte, capaz de garantizar soberanía y justicia social.
“El proyecto nacional se construye defendiendo la producción, el trabajo y la soberanía. Es ahí donde se juega nuestra identidad como Nación”, expresó Tomada en el cierre de su exposición, en medio de aplausos de los presentes.
Aportes complementarios en la mesa
Aunque el foco estuvo puesto en la figura de Tomada, los otros disertantes ofrecieron lecturas complementarias. Alfredo Ossorio analizó el debilitamiento institucional del Estado argentino bajo políticas neoliberales, que —según señaló— dejaron libradas al mercado decisiones estratégicas y debilitaron derechos laborales.
En tanto, Carlos Vilas llamó a repensar el movimiento nacional-popular frente al capitalismo financiero globalizado, planteando la necesidad de actualizar herramientas políticas sin caer en “nostalgias paralizantes”.
Un mensaje con eco sindical
El auditorio valoró la intervención de Tomada como un llamado de atención en un contexto donde los trabajadores ven amenazados sus derechos. La referencia explícita al ajuste de Milei encontró eco en la audiencia, que vinculó el diagnóstico del exministro con las problemáticas cotidianas del movimiento obrero: caída del poder adquisitivo, precarización y debilitamiento de la negociación colectiva.
La actividad fue organizada por el Departamento de Planificación y Políticas Públicas, el Centro de Estudios en Planificación, Estrategia y Gestión Pública Dr. Carlos Matus y la Maestría en Políticas Públicas y Gobierno de la UNLa. Desde la casa de estudios destacaron que encuentros de este tipo fortalecen el rol de las universidades del conurbano como espacios de producción de pensamiento crítico y compromiso social.
Con la figura de Carlos Tomada en el centro, el debate en la UNLa dejó una conclusión compartida: en tiempos de incertidumbre, defender el trabajo y la producción es defender la soberanía. Una definición que, más allá del plano académico, resuena con fuerza en el movimiento obrero organizado, que ve en estos planteos una hoja de ruta frente a los intentos de flexibilización y retroceso en derechos laborales.