La ciudad entrerriana de Gualeguaychú, además de ser emblemática por el carnaval, hace un tiempo era conocida como una atracción para los apostadores debido a los múltiples establecimientos a donde concurrían apostadores de diversas partes del país. Sin embargo, desde hace algunos años la actividad bajó y comenzaron con las cesantías a los trabajadores.
Los propietarios de la compañía llamada Newtronic S.A despidieron 20 empleados de dos salas de apuestas y otros a 20 del resto de la provincia. Una noticia que se veía venir porque desde hace algunos meses cobraban en cuotas y/o con atrasos, lo que evidenció aún más un escenario de crisis. A eso hay que sumarle paros y hasta un corte de energía por una deuda millonaria.
Ante el caótico panorama, los dueños de la compañía de Entre Ríos, los hermanos Carlos y Alfredo Ferrari, junto al matrimonio Jorge Aníbal Pérez y María Ximena Velázquez, buscaron comprador para sus negocios y cedieron los derechos de explotación de las doce salas de juego y las tragamonedas a Carlos y Diego Banfi, del Grupo Teleinfo, que operan en casinos de Concepción del Uruguay y Diamante.
No obstante el traspaso, a pesar de que fue avalado por el Instituto de Ayuda Financiera a la Acción Social (IAFAS) porque incorporaba a los cerca de 200 empleados de Newtronic, el sindicato ALEARA denunció que no pasaron a la nueva firma.
A propósito, los trabajadores indicaron que "hoy seguimos siendo empleados de Newtronic, pero el sueldo lo pagó Teleinfo bajo la figura de pago a proveedor, no como un salario, y por eso tampoco se hicieron los pagos de las obras sociales ni las cargas previsionales".
El proceso en Tribunales
Los problemas de Newtronic son más graves de lo que se pensaba porque tiene un pedido de concurso preventivo en la Justicia Comercial de Entre Ríos. A propósito, los apoderados de la firma indicaron que "en los términos de su objeto social, (la empresa) mantuvo un contrato para la provisión de máquinas de juegos de azar en alquiler en nueve (9) salas de la provincia de Entre Ríos, ello por resultar adjudicataria de la Licitación Privada N.º 001/03 IAFAS y contrato de renovación de fecha 23/3/2011 y, 2) a la concesión y administración de la explotación de tres (3) salas de juego en la misma provincia (conforme contratos de fecha 29/12/2015 Gualeguay, 4/12/2013 Gualeguaychú y 10/4/2015 La Paz)".
Igualmente, según Ip Profesional, tiene relación con otras compañías porque a su vez es accionista de Neogame S.A. y de Neoformosa S.A. dos sociedades también dedicadas a negocios de casino y explotación de un hotel en la Ciudad de Formosa.
¿Por qué Newtronic entró en una debacle?
Según trascendió, las causas que pusieron en peligro a la empresa fueron “el fuerte endeudamiento y a la muy elevada conflictividad entre sus accionista” y acusaron a Alfredo Ferrari de obstaculizar el entendimiento entre los socios. Lo acusaron de no acatar las decisiones de la asambleas de accionistas que, finalmente, lo destituyeron de su cargo.
Además, pormenorizaron la pérdida de clientes “producto de la pandemia ocurrida en 2020”, ya que “en un primer momento se debido disponer el cierre de todas las salas y luego la reducida asistencia a las salas por parte del público que implicó una merma muy considerable de la facturación, lo cual implicó en un principio se generaran pasivos particularmente fiscales y con proveedores de máquinas de juego que se fueron incrementando hasta el presente".
La presentación judicial la realizó Alejandro Daniel Sivori, presidente de Newtronic S.A. y en ella se concluye que, "la exigibilidad de las obligaciones asumidas con distintos acreedores, derivaría en la indefectible quiebra de la empresa. Actualmente, se han trabado embargos sucesivos respecto de las cuentas bancarias, lo que impide la operatoria sin acudir al concurso de acreedores. Para evitarla, tal como lo decidimos en reunión de Directorio del 22/05/2025, y la Asamblea del 25/2/2025, es necesario reestructurar ordenadamente el pasivo, sobre la base de esa condición, poder refinanciarlo".