Autoridades de la Asociación Personal Jerárquico de Bancos Oficial (APJBO) manifestaron su incredulidad con respecto al 1,9 % de inflación del mes de agosto, difundido por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), mientras que advirtieron que “la gente está muy endeuda, con la tarjeta de crédito al tope”
El titular de la entidad gremial, Arturo Quiñoa, apuntó que “de nuevo vuelven a mentirnos con la inflación, sacan otra vez el 1,9% para que no dé 2, siempre hacen lo mismo con un número que no lo puede superar”.
El dirigente señaló “el costo del transporte y el de los servicios que aumentan cada día más, pero los sueldos lo hacen en 1%”, al tiempo que exigió el incremento del 20% en los salarios mínimo de los trabajadores, así como de las jubilaciones.
“La diferencia entre la inflación y la realidad es sencilla: vas al supermercado y no te alcanza la plata”, sostuvo y describió que “la gente está cada vez más endeudada, con la tarjeta de crédito al tope”.
En sintonía con el comunicado de la Mesa Sindical difundido en la jornada del jueves, sostuvo que “el Gobierno debe tomar nota de lo que pasó el otro día, donde la gente eligió otra opción porque no d respuestas”. “Lo único que considera es vetar hablando de presupuesta, pero, le baja los impuestos a los que más tienen y a los trabajadores cada vez los castiga más, es más, cada vez hay más personas que pagan el impuesto a las ganancias”, agregó.
Sobre este último punto, desarrolló que “al mantenerse el salario mínimo, vital y móvil cada vez más abajo, la gente es alcanzada por el impuesto a las ganancias, aunque sea por el incremento del 1%”.
Los bienes que más aumentaron
Según el relevamiento del INDEC, el mayor incremento se registró en Transporte (3,6 por ciento), impulsado por la suba de combustibles y la compra de vehículos. Le siguieron Bebidas alcohólicas y tabaco (3,5 por ciento), con el cigarrillo como protagonista, y Restaurantes y hoteles, que treparon fuerte en el Noroeste (5,3 por ciento) y en Cuyo (4,8 por ciento).
Los alimentos y bebidas no alcohólicas volvieron a superar el promedio general, con alzas de entre 2,3 y 2,6 por ciento, lo que explica por qué el changuito se siente cada vez más pesado, aunque el índice oficial luzca contenido.
En tanto, los precios regulados --tarifas, transporte y servicios básicos-- escalaron un 2,7 por ciento, confirmando que los aumentos decididos desde el Estado también pesan sobre la inflación.
La percepción ya es diferente
En el día de ayer, la Mesa Sindical, que también es integrada por APJBO, consideró que la estadística de evolución de los precios está “desactualizada” porque “toman el tipo de gastos individuales o familiares como si viviéramos en el año 2004”.
No obstante, valoró que a pesar de que “existe un esfuerzo denodado de los gobernantes y de algunos medios de comunicación por desviar las razones y alcances de semejante diferencia, la percepción popular no falla a la hora de hacer los números”.