Ante la amenaza del presidente de la Nación, Javier Milei, de vetar la Ley de Financiamiento Universitario, la Federación Universitaria Argentina (FUA) y el Frente Sindical Universitario (integrado por gremios docentes y nodocentes) convocaron a un paro total para el próximo 26 de septiembre y a una movilización al Congreso de la Nación el 2 de octubre. La Ley de Financiamiento Universitario fue sancionada este jueves por el Senado con 57 votos a favor, una abstención y solo 10 votos en contra.
Vale destacar que la Ley de Financiamiento Universitario busca actualizar las partidas presupuestarias para cubrir gastos de funcionamiento, docencia, investigación y extensión en las universidades. Sin embargo, pese a que el impacto fiscal de la medida es del 0,14 por ciento del PBI, según la Oficina de Presupuesto del Congreso, el presidente Javier Milei amenaza con vetarla.
Además, el Gobierno de La Libertad Avanza destinó $3,8 billones a las universidades nacionales, mientras que el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) exige $7,2 billones. Esta diferencia fue lo que generó mayor preocupación entre los líderes educativos, quienes consideran que la decisión del Gobierno significará un retroceso enorme en la educación pública.
Reacciones y Pronósticos
Daniel Filmus, exministro de Educación, Ciencia y Tecnología, manifestó que "no se va a cumplir con el 0.2 por ciento del presupuesto que en el 2005 dictó la Ley de educación técnica; no se va a cumplir con el 6 por ciento del PBI que en el 2006 incluye la Ley de financiamiento educativo; ni tampoco se va a cumplir con el 0.45 que la Ley de financiamiento de ciencia preveía para 2025".
Por su parte, el presidente del CIN y rector de la Universidad Nacional de San Luis, Víctor Moriñigo lamentó: "No hay intención cierta de recomponer los salarios docentes y no docentes para al menos igualar la situación de pérdida frente a la inflación”. Al tiempo que subrayó: “La única certeza que surge de este presupuesto es que los docentes y no docentes en 2025 van a tener los mismos salarios que hoy, ni siquiera se contempla la inflación, que se estimó del 18%".
Asimismo, anunció que las federaciones se reunirán el 24 de septiembre para definir las medidas a tomar "salvo que el Gobierno tienda una diagonal que permita modificar esta situación, aunque lo vemos muy poco probable porque no vemos voluntad de dialogar", afirmó Moriñigo.
La marcha universitaria del 2 de octubre busca presionar al Parlamento para que rechace el veto de Milei y apruebe la Ley de Financiamiento Universitario. La comunidad educativa y los líderes políticos están atentos a esta situación, que puede definir el futuro de la educación pública en Argentina.
En tanto, el vicerrector de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y dirigente radical Emiliano Yacobitti aseguró que su objetivo no es plantear que "si hay veto hay marcha" sino tratar de que no se anule el financiamiento universitario ya que se traduciría en "tener una peor educación superior".
"Tenemos que tratar de que no haya veto. Si hay veto va a continuar la pérdida de calidad día tras día en todas las universidades. Por ahí no es algo que se note hoy pero es algo que a muy corto plazo lo vas a notar", señaló Yacobitti.