Como venían alertado sus trabajadores, el gobierno nacional avanzó con su plan de ajuste sobre la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC). En el organismo encargado de la seguridad aérea del país, se produjeron 28 despidos, considerados “arbitrarios” por parte de la coordinación nacional de ATE en el organismo. Se trata de inspectores a quienes no se les renovarán sus contratos, una maniobra que refuerza las denuncias sobre la idea de achicar el sector por parte de la gestión libertaria. Desde ATE-ANAC se viene denunciando los peligros que esta política significa, ya que no sólo genera precarización laboral, sino que expone a “riesgos innecesarios” las operaciones en las terminales de todo el país.
Ante esto, una asamblea votó una medida de fuerza para esta semana, para revertir las cesantías y para conseguir las condiciones necesarias para realizar las tareas con seguridad y eficacia.
Los despidos en la ANAC fueron confirmados por la dirigencia de ATE, que desde hace tiempo viene realizando acciones para visibilizar el plan de ajuste que busca imponer el gobierno en el sector. Antes ya se habían realizados cambios en el Código Aeronáutico, y se habían adelantado que muchos de los empelados del organismo serían reasignados.
Con las cesantías de 28 inspectores se confirman las denuncias del gremio. A fines de mayo, a través del Boletín Oficial, el Gobierno nombró a Oscar Alfredo Villabona como nuevo administrador en reemplazo de María Julia Cordero, quien había renunciado a su puesto como interventora del organismo.
“Los responsables políticos de esta decisión actúan de manera perversa con trabajadores que han sostenido con compromiso y profesionalismo un sistema estratégico para el país”, resaltaron desde ATE-ANAC mediante un comunicado.
Para el gremio, las nuevas autoridades pretenden “de un día para el otro prescindir de sus servicios sin medir las consecuencias operativas ni el impacto profundo que esto tiene sobre el funcionamiento del organismo y la seguridad operacional”.
Cuando comenzaron las versiones de ajuste, una asamblea le dio mandato a la conducción a convocar ante cualquier intento de despido se llame a un paro nacional. Además, la dirigencia participó del plenario de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) y acompañó la declaración e estado de “alerta y movilización” que hizo la entidad.
Plan de Lucha
Ante esto, Marcelo Belelli, coordinador nacional de ATE-ANAC, confirmó una jornada de protesta para el próximo jueves 19 de agosto, con afectación de los vuelos. “La seguridad no se negocia”, afirmaron desde el gremio, que remarcaron que estas políticas ajuste “contradicen las recomendaciones de la Organización Internacional de Aviación Civil (OIAC), afectando gravemente la imagen de la Argentina e el mundo, y lo que es más grave poniendo en riesgo la seguridad aérea”.
Antes de concretarse los despidos, las versiones que tenían los delegados era que la idea de Federico Sturzenegger, a quien apuntan por ser el ideólogo del desguace estatal, era achicar a la mitad el personal de la ANAC. Por eso, hicieron una jornada nacional por la seguridad operacional a comienzos de junio.
“Los despidos que se realizaron en la ANAC son contrarios a lo que viene planteando la OIAC, que dice que hay que tener personal idóneo con sueldo acordes a la industria para tener seguridad operacional”, sostuvo Belelli al respecto de esta situación. El dirigente le apuntó a Hernán Gómez, subsecretario de Transporte Aéreo, y al ministro Sturzenegger, a quienes acusó de “poner en riesgo la seguridad aérea”. “Queremos ser claros, menos personal de la ANAC es menos capacidad de control, y es poner en riesgo la seguridad aérea”.
Cuestionamientos
Para apoyar la advertencia, ATE-ANAC difundió un duro documento donde criticó los últimos cambios que se dieron en el organismo en particular y el sector aerocomercial en general. La coordinación nacional el gremio dio cuenta de los cambios que preparan las nuevas autoridades de la ANAC, en el marco del plan motosierra de la gestión libertaria.
En el texto, se denuncia que estas decisiones “no sólo afectan derechos laborales: ponen en riesgo vidas humanas”. En especial, se hace referencia a la reciente reforma del Código Aeronáutico, el cual elimina la obligación de contar con jefes de aeródromos en todos los aeropuertos públicos, “reduciendo la presencia estatal en funciones críticas”.
“En la aviación, el ‘factor humano’ se refiere al rol que cumple cada persona dentro del complejo sistema que garantiza operaciones seguras”, explicó el gremio. “Inspectores, técnicos, instructores, planificadores, controladores y especialistas trabajan con altos niveles de concentración, responsabilidad y formación. Cuando estas personas son despedidas o trabajan bajo estrés, se incrementa el margen de error y con él, el riesgo de accidentes”, alertaron.
Para ATE-ANAC, esta reforma y los despidos preparados son “el cóctel peligroso” que amenaza a la actividad.