Seguidores del “Pata” Medina tomaron por la fuerza la sede de la UOCRA La Plata y lanzaron insultos contra la intervención

Un grupo vinculado al exjefe de la seccional platense del gremio de la construcción irrumpió por la fuerza en la histórica sede del gremio, cortó calles y lanzó insultos y acusaciones contra la intervención. La acción fue repudiada por trabajadores del sector, que alertaron sobre el clima de violencia y exigieron medidas de seguridad al empresariado y a las autoridades.

Sabado, 26 de julio de 2025 17:09

Lo que había sido anunciado como una “marcha de antorchas” terminó siendo una violenta toma del edificio gremial de la UOCRA en La Plata durante la tarde-noche de este viernes. Un grupo vinculado al exdirigente Juan Pablo “Pata” Medina irrumpió ilegalmente en la histórica sede de calle 44, protagonizó cortes de tránsito en ambas manos y generó momentos de tensión con vecinos y trabajadores del sector. La acción fue impulsada por familiares directos del exlíder sindical, con el objetivo de recuperar visibilidad y presionar para reinsertarse en la vida gremial.

Encabezados por su hijo Cristian “Puly” Medina y su sobrino Braian, los manifestantes concentraron unas 200 personas en las puertas del edificio, actualmente intervenido y perteneciente a la conducción nacional de UOCRA. Allí forzaron el ingreso, desplegaron banderas con consignas contra el interventor Oscar Rizzo (designado por el titular nacional del gremio, Gerardo Martínez) y cortaron por completo la avenida 44 en plena hora pico, colapsando el tránsito en la zona céntrica de la capital bonaerense.

Un operativo intimidatorio y sin respaldo sindical

La jornada, promovida bajo el lema de “resistencia”, despertó fuertes cuestionamientos desde el propio gremio de la construcción. La “Agrupación de Trabajadores/as Unidos, afiliados a UOCRA”, que responde al referente de la UOCRA La Plata, Iván Tobar, repudió en la previa el accionar de los Medina y alertó sobre los riesgos que implicaba una convocatoria cargada de tensión: “Dejamos constancia de que dicha agrupación será considerada responsable por cualquier tipo de daño, agresión física o verbal que pudieran sufrir los trabajadores y trabajadoras que desarrollan tareas en las obras ubicadas en las inmediaciones del lugar de convocatoria”, expresaron en un comunicado.

La advertencia no fue exagerada: el despliegue incluyó la presencia de barrabravas identificados con el espacio del “Pata”, entre ellos Cristian Camilleri, alias “El Volador”, conocido integrante de la barra de Gimnasia y Esgrima La Plata. Su participación en las reuniones organizativas previas refuerza la preocupación por el tipo de actores que el clan Medina vuelve a movilizar en su intento desesperado por recuperar protagonismo.

El viejo estilo Medina reaparece

La escena resultó familiar para los platenses. El ingreso forzado al edificio, las pintadas, el hostigamiento al personal y los cortes totales de calle remiten directamente a las prácticas que durante años dominaron la vida sindical en la región bajo el liderazgo de Medina.

El edificio tomado, si bien ya no funciona como sede gremial, sigue siendo propiedad legal de la UOCRA Nacional.

Una advertencia para las autoridades y el sector empresarial

Los trabajadores de la construcción de La Plata también le pidieron al empresariado que extreme medidas de seguridad para resguardar al personal afectado por estas movilizaciones, al tiempo que se exigió la intervención de las autoridades ante la posibilidad de que se repitan hechos similares. “Solicitamos al sector empresarial que adopte las medidas preventivas necesarias y requerimos la intervención de las autoridades competentes en caso de registrarse hechos de violencia”, completaron.

Finalmente, el grupo se dispersó, pero dejó una nueva marca de inestabilidad sobre una seccional que sigue intervenida.

El intento de resurgir a través del caos callejero

La escena dejó en claro que el clan Medina no ha abandonado su estilo, ni su ambición por retomar el control de la UOCRA La Plata, aun cuando su etapa haya quedado atrás para la enorme mayoría de los trabajadores del sector.