La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) sacó un fuerte comunicado contra la CGT y recalcó que “debe actuar” ante “el ajuste, la represión y la proscripción política”, en el marco de la movilización que encabezan distintas fuerzas sociales y políticas hacia la Plaza de Mayo en solidaridad con la expresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner.
La UOM apuró a la central obrera a “asumir el rol de conducción que la historia demanda y a impulsar, junto a todos los sectores populares, un plan de lucha”, luego de que esta rechazara realizar un paro general.
Mediante sus redes sociales, el gremio que encabeza Abel Furlán describió que “el pueblo del trabajador atraviesa una emergencia social: caída del salario real, desempeño y cierre de industrias, mientras el gobierno de Javier Milei aplica un plan de ajuste, endeudamiento y privatizaciones al servicio del poder económico y financiero”.
Cohesión social y plan de lucha
Además, describió que, a la par, “se delegan superpoderes a las fuerzas de seguridad para vigilar y reprimir sin control judicial, criminalizando la protesta y hostigando a la ciudadanía en general”.
“En este contexto, avanza la condena arbitraria contra Cristina Fernández de Kirchner, sin pruebas, con jueces designados a dedo y validada por los medios hegemónicos. No es un hecho aislado: es el capítulo más grave del lawfare para proscribir al liderazgo popular e intimidar a quienes luchan”, puntualizó.
En este sentido, consideró que “la CGT no puede permanecer inmóvil, El movimiento obrero debe encabezar una gran confluencia de luchas junto a estudiantes, jubilados, pymes y sectores golpeados por el ajuste”.
“Asumir el rol de conducción”
Por eso, la UOM exigió, en carácter de urgencia tres puntos importantes. En primer lugar, propusieron convocar a un Comité Central Confederal para debatir la situación nacional y coordinar una respuesta en común y federal del conjunto del movimiento obrero.
Con respecto al segundo ítem, solicitó lanzar un plan de lucha nacional, sostenido y escalonado con movilizaciones, plenarios regionales y paro generales, articulado con todos los sectores populares afectados.
Y, en tercer lugar, pidió “pronunciarse firmemente en defensa de la absolución y plena reivindicación política de Cristina Fernández de Kirchner; el rechazo contundente al lawfare como herramientas de disciplinamiento político y social; y la protección de libertades democráticas y la derogación de los superpoderes represivos otorgados a las fuerzas de seguridad”.
Luego, reflexionó: “Es tiempo de transformar la preocupación en acción colectiva” y enfatizó: “Convocamos a la CGT a asumir el rol de conducción que la historia demanda y a impulsar, junto a todos los sectores populares, un plan de lucha que frene el ajuste, la persecución y la entrega de patrimonio y soberanía, defienda la democracia, los derechos conquistados y el futuro del pueblo argentino”.
En el día de ayer, Abel Furlán, en declaraciones radiales, remarcó la importancia de que la CGT realice un plan de lucha “sistemático” para este miércoles e insistió en que la convocatoria la hace “la historia del movimiento político”, es decir, el peronismo.
Con relación a ese punto, repasó: “Si uno repasa la historia de nuestro espacio político, siempre han sucedido cosas traumáticas que nos han obligado a los trabajadores, a las organizaciones sindicales a cumplir un rol protagónico. Mañana no puede ser la excepción”.