Tras reunirse con integrantes de la Confederación General del Trabajo (CGT), el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, mantuvo un nuevo encuentro con reconocidos dirigentes sindicales. Esta vez, el mandatario bonaerense dialogó con las comisiones ejecutivas de la CTA Autónoma y de la CTA de los Trabajadores, encabezadas por sus secretarios generales, Hugo Cachorro Godoy y Hugo Yasky.
Mediante un comunicado, ambas centrales obreras calificaron a la actividad de “importante”, en la cual analizaron “el grave escenario que se abre a partir de la presentación de diversos proyectos de ley impulsados por el gobierno de Milei, entre ellos la reforma laboral”.
En ese marco, sostuvieron que “de concretarse, esta iniciativa implicaría un cambio estructural de enorme gravedad en perjuicio de la clase trabajadora, los sectores populares y las organizaciones sindicales”. “Se trata de una ofensiva que apunta directamente a debilitar y destruir las herramientas de organización colectiva del pueblo trabajador”, añadieron ambas instituciones.
Revertir un “rumbo negativo”
Según señalaron, con Kicillof coincidieron “en la necesidad de aunar esfuerzos para seguir esclareciendo los efectos devastadores de estos proyectos y avanzar en la construcción de acciones de intervención política e institucional, tanto en el Congreso Nacional –articulando con los gobernadores– como en las calles, donde la participación popular sigue siendo la clave para revertir este rumbo negativo que padece el pueblo argentino”.
También, analizaron el contexto de la reforma laboral, que, según sostuvieron, “es el de un país que tiene el salario mínimo vital y móvil más bajo de América Latina, con ingresos que disminuyen al ritmo de la precarización laboral y con millones de hogares que hoy o no llegan a fin de mes o se endeudan para poder llegar a fin de mes”.
Nuevas mayorías
Asimismo, Kicillof, Godoy, Yasky y el resto de los dirigentes aprovecharon la ocasión para examinar el escenario político hacia 2026. A propósito, consideraron que el actual panorama “requiere mayores niveles de unidad política para convocar a los millones de argentinos y argentinas que no participaron en las últimas elecciones y abordar el creciente descontento social frente al gobierno de Javier Milei, a través de la construcción de alternativas confiables, con el pueblo como protagonista central”.
“En este sentido, ambas CTA asumen la responsabilidad y el compromiso de construir propuestas que amplíen y fortalezcan la unidad del campo popular”, remarcaron, al tiempo que reafirmaron “la decisión de continuar con el plan de acción y la movilización para enfrentar la reforma laboral y para defender los derechos conquistados por la clase trabajadora”.
A fines de la semana pasada, el gobernador bonaerense protagonizó una reunión con autoridades de la CGT en su sede central, en la cual tuvo como eje central la preocupación sindical por lo que calificaron como un verdadero “ataque al trabajo” por parte del Gobierno nacional.
Según informó la entidad gremial en un comunicado, durante la reunión se intercambiaron posiciones sobre los efectos de las medidas económicas instrumentadas por la Casa Rosada, en un contexto de fuerte caída del poder adquisitivo, retracción de la actividad económica y deterioro del mercado interno.