La Asociación de Trabajadores de la Sanidad (ATSA), encabezada por Héctor Daer, selló un acuerdo paritario con las cámaras que agrupan a clínicas, sanatorios y hospitales, que establece un incremento del 4,5% para el trimestre mayo-julio, distribuido en tres tramos mensuales del 1,5%, además de sumas fijas de $25.000, $40.000 y $60.000 para cada mes. Este aumento supera la pauta oficial del 1% mensual fijada por el Gobierno, lo que pone en duda su homologación por parte de la Secretaría de Trabajo, a cargo de Julio Cordero.
Pese a esta incertidumbre, desde el sector empresarial habrían garantizado el pago del aumento. En caso de que el Gobierno mantenga su postura, el acuerdo podría replicar situaciones recientes donde otros gremios, como Comercio y la UOM, también firmaron por encima del tope oficial, sin aval estatal, pero con ejecución efectiva en los pagos.
Los puntos clave del acuerdo
El acuerdo contempla aumentos salariales acumulativos y asignaciones no remunerativas que benefician a las diferentes categorías del sector. Los incrementos acordados son los siguientes:
- Incrementos salariales acumulativos:
- 1,5% en mayo.
- 1,5% en junio.
- 1,5% en julio.
- Asignaciones no remunerativas mensuales:
- $25.000 en mayo.
- $40.000 en junio.
- $60.000 desde julio y hasta nuevo acuerdo.
Además, se pactó una revisión en agosto de 2025, lo que permite mantener actualizados los ingresos en función del contexto económico y social.
Impacto en las escalas salariales
El nuevo acuerdo impacta directamente en las escalas salariales del sector. Por ejemplo, un Cabo Enfermero Profesional recibirá un salario básico de $1.075.482,74 en junio, al que se sumarán los $40.000 de asignación no remunerativa, alcanzando un ingreso total de $1.115.482,74. Este esquema se replica para todas las categorías, con ajustes progresivos en los meses posteriores.
El acuerdo también incluye el incremento de ítems ajustados al salario básico, como:
- Lavado y planchado.
- Antigüedad.
- ATSA 2010.
- Otros pluses adicionales.
Acuerdo tras semanas de tensión
El convenio fue alcanzado tras semanas de tensión, con medidas de fuerza impulsadas por la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (FATSA), que demandaba una recomposición salarial mayor. La negativa inicial del sector empresario a mejorar su oferta había generado un clima de conflicto que, según Héctor Daer, amenazaba con profundizarse. “Vamos a resistir para que no nos perjudiquen, para no perder y para que no nos bajen los salarios”, expresó el dirigente gremial, quien también integra la cúpula de la CGT. Y añadió: “Con trabajadores mal pagos no hay sistema de salud que funcione”.
Desde la Agrupación Celeste y Blanca se destacó que este logro fue posible gracias a la unidad, el compromiso y la lucha colectiva de los trabajadores. “Hemos roto el cepo impuesto por el gobierno y vencido la intransigencia empresaria”, afirmaron. Además, subrayaron la importancia de continuar organizados para seguir conquistando derechos.