Encuesta previa al “CriptoGate” revela que Milei no cuenta con humor social para avanzar con la reforma laboral

El relevamiento de la consultora Zuban Córdoba, realizado entre el 30 de enero y el 3 de febrero de 2025 revela que más del 70% de los encuestados está en desacuerdo con varios de los puntos más polémicos del proyecto. Es decir, los datos encima son de dos semanas antes de que estallara el escándalo de la estafa de $LIBRA que afectó fuertemente la credibilidad del presidente Javier Milei.

Por Matías Tagliani

Director de Data Gremial

Martes, 18 de febrero de 2025 17:24

El debate sobre la reforma laboral que impulsa el bloque de La Libertad Avanza en el Congreso de la Nación se está intensificando, especialmente después de que se intentara sin éxito implementar la reforma a través de la Ley de Bases el año pasado. En 2025, el Gobierno Nacional vuelve a poner en marcha un nuevo proyecto, titulado Promoción de Inversiones y Empleo, que busca realizar importantes cambios en la Ley de Contrato de Trabajo (N°20.744), especialmente dirigidos a flexibilizar las condiciones laborales. Sin embargo, un reciente estudio de opinión pública revela un rechazo generalizado entre los argentinos hacia muchas de las medidas propuestas.

Las medidas que menos gustan

La encuesta de la consultora Zuban Córdoba, realizada entre el 30 de enero y el 3 de febrero de 2025 con un margen de error de +/-2%, revela que más del 70% de los encuestados está en desacuerdo con varios de los puntos más polémicos del proyecto, como la extensión de la jornada laboral y la flexibilización de las vacaciones.

Vacaciones: El proyecto propone cambios significativos en uno de los derechos más arraigados en la cultura laboral argentina: las vacaciones. Si bien la modificación apunta a permitir que los trabajadores disfruten de sus días libres en cualquier época del año, el 60,1% de los encuestados expresó su desacuerdo con este cambio, mientras que solo un 30,9% lo apoyó. En particular, la posibilidad de fraccionar las vacaciones y otorgarlas en períodos más cortos fue vista con recelo.

Jornada laboral: Otro de los puntos más controversiales es la posibilidad de extender la jornada laboral hasta 12 horas sin que el empleador deba pagar horas extras. Este punto recibió un rechazo contundente de más del 71% de los encuestados, una cifra alarmante para el Gobierno que propone flexibilizar el régimen laboral. Actualmente, la ley estipula que la jornada laboral no puede superar las 8 horas diarias o 48 semanales sin la correspondiente compensación económica por horas extras.

Ticket canasta: La propuesta de volver a instaurar los "ticket canasta", aquellos vouchers de compra con los que los empleadores en los años '90 compensaban parte de los salarios, también encontró una gran resistencia. El 81,3% de los consultados rechazó esta medida, que había sido utilizada anteriormente para evitar el pago completo del salario.

El panorama de rechazo generalizado

Si bien el proyecto de reforma laboral propone una serie de modificaciones, los resultados de la encuesta reflejan una postura mayoritaria de rechazo a los cambios en las condiciones laborales. Según Gustavo Córdoba, director de la consultora, “no hay clima para una reforma laboral al menos en términos de opinión pública". Además, subraya que el Gobierno está avanzando sin el consenso necesario para grandes reformas, lo cual podría ser un obstáculo importante para la implementación del proyecto.

En general, las propuestas que más rechazo generan son las relacionadas con la modificación del régimen de vacaciones y de las horas extras, además de la posibilidad de flexibilizar las condiciones laborales, lo que podría traducirse en mayores perjuicios para los trabajadores. En contraste, algunas medidas que se presentan como mejoras en la contratación de empleados o la posibilidad de pagar indemnizaciones en cuotas han encontrado una aceptación algo mayor, pero lejos de ser un consenso.

El impacto del escándalo de $LIBRA

Cabe señalar que los datos recolectados en esta encuesta fueron obtenidos dos semanas antes de que estallara el escándalo de la estafa de $LIBRA, que afectó fuertemente la credibilidad del presidente Javier Milei. Este escándalo, que involucró un fraude financiero masivo, generó una ola de desconfianza en el liderazgo del mandatario y su gestión económica. Si bien la reforma laboral ya enfrentaba una fuerte resistencia, el contexto actual de creciente escepticismo hacia Milei podría haber intensificado aún más el rechazo hacia las medidas propuestas.

De hecho, en la situación actual, con la reputación del presidente en crisis debido al escándalo, es probable que el nivel de resistencia de la sociedad a las reformas laborales sea aún mayor. La falta de consenso en torno a estos cambios podría verse amplificada por el malestar generalizado que este tipo de controversias genera entre los ciudadanos, especialmente cuando las reformas son percibidas como perjudiciales para los trabajadores.

Javier Milei con el CEO de Kip Protocol, la empresa a cargo de Libra.

¿Qué significa este rechazo para el Gobierno?

El panorama que surge de la encuesta es claro: el proyecto de reforma laboral, impulsado por el presidente Javier Milei, enfrenta una resistencia significativa entre la ciudadanía, especialmente entre los trabajadores y las organizaciones sindicales. Córdoba apunta que esta falta de apoyo refleja una tendencia más amplia de la sociedad argentina, que aunque busca una reforma económica, no está dispuesta a renunciar a ciertos derechos sociales que considera fundamentales.

A pesar de las críticas, el Gobierno sigue adelante con su agenda de reformas laborales, aunque el fuerte rechazo a los puntos más controvertidos podría dificultar la viabilidad de la reforma en su totalidad. En este sentido, la oposición también podría aprovechar este descontento para capitalizar políticamente el tema, especialmente en un año electoral como lo es 2025.

El futuro de la reforma laboral parece incierto, y será crucial observar cómo avanza el debate en el Congreso y cómo se ajusta el Gobierno para intentar llegar a un consenso con sectores de la sociedad más reticentes. La propuesta de flexibilización laboral sigue siendo uno de los temas más polarizadores en la agenda política del país.