La combinación de congelamiento salarial, despidos y precarización está llevando al límite a las obras sociales de los trabajadores del Estado. Con déficits millonarios, caída de afiliados y prestaciones cada vez más acotadas, los gobiernos avanzan sobre las cajas y desplazan a los sindicatos de la conducción. De Unión Personal a IOSPER, ObSBA e IOMA, una radiografía de la crisis.